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jueves, 30 de junio de 2011

La persona más especial que he conocido...


            Hola, como están, espero que se encuentren muy bien en este maravilloso jueves, ya se respira el fin de semana ¿No creen?...

            Bueno, el día de ayer, leí una frase que me trajo varios recuerdos, recuerdos de mis años en la secundaria, recuerdos padres pero que las personas en ocasiones querían hacer que no lo fueran, pero no pudieron lograrlo…

            Pues les contaré, cuando iba a entrar en la secundaria, me inscribí en otra escuela diferente en la que había pasado toda mi primaria, pensaba que sería divertido porque estarían todos mis amigos en la otra secu, así que por eso me decidí el cambiarme, pero no fue así, me tocó estar con sólo un compañero de la primaria, además que en mi salón eran muy llevados y para mí, todo eso era nuevo, sentía mucha tristeza y el jueves me salí de la escuela y me regresé a la secundaria de donde pasé mi primaria…

            El lunes siguiente, llevaba lo necesario para la escuela, libros, cuadernos y demás, sin embargo sentía algo de miedo, porque la mitad del salón serían personas desconocidas, lo que me agradaba era que estaría con mi gran amigo de la infancia, Sergio, así que por ello no sentía mucho miedo, entré al salón, me senté donde me indicaron porque estaban acomodados los alumnos y luego tomé las clases, después de tres clases sonó la campana para salir al recreo, y salí con mi amigo Sergio…

Juan Pa con su hermana Gemma
            Pero ahí sucedió algo que marcaría parte de mi vida, el me presentó a un amigo que había hecho en la semana de escuela que ya llevaban, era una persona muy especial, me dijo que era algo bromista y me cayó bien desde el principio, su nombre era Juan Pablo Martínez Ramírez, tenía el síndrome de Down…

            Para varios de mis compañeros era como la burla del salón al comienzo, se reían de el por las cosas que hacía y lo hacían hacer varias cosas para reírse, yo no le encontraba la gracia y menos la burla, porque podría verse así por el exterior, pero en el interior había una persona, una persona que sentía y que además era capaz de hacer muchas cosas, tal vez tuviera dificultades para realizar algunas actividades, pero para otras era mucho mejor que muchos que eran “Normales”

            Fue un gran amigo que tuve en esos tres años de secundaria, era agradable pasar el rato con él, y sé que muchos me veía raro por juntarme con él o por hablarle, pero lo que esas personas se perdieron fueron todas las bellas experiencias que me dejó el haberlo conocido, porque siempre fue muy sencillo, era feliz con poco, además que tenía una sonrisa en su rostro y se preocupaba mucho por sus amigos, eso es algo que muchos de nosotros no hacemos o captamos…

            Así que muchos podrán decir que es raro, diferente, extraño pero yo les diré que es mucho mejor que muchos de nosotros, es capaz de hacer grandes cosas y algunas mucho mejor que cualquiera, no me arrepiento de haberte conocido Juan Pa, gracias por el tiempo que compartiste conmigo, te agradezco tu amistad y todas las enseñanzas que pude aprender contigo, gracias por todo…          

miércoles, 29 de junio de 2011

Perdón... perdí la inspiración

            Hola a todos, espero que se encuentren bien, es miércoles, el ombligo de la semana...

Perdí la inspiración..
            Bueno, pues lamento decirles, pero si, el día de hoy he perdido la inspiración para hacer algún escrito, así que por el día de hoy no tengo nada para contarles…

            Este es uno de esos días en el que pasa que todo sale mal, que piensas que todo estaba de maravilla y que no podría pasar nada mal, pero al final resulta que no es así, que todo lo que pasa esta al revés…

            No sé, tal vez es la lluvia, o tal vez es que tengo mala suerte, pero sea lo que sea solamente sé que el día de hoy no tengo ánimos de nada, no puedo pensar en decir algo interesante, pero pues lamentablemente soy persona y también me suceden cosas malas a mí, lo lamento, nos veremos luego…

            Que tengan lindo día, nos veremos el día de mañana con algún escrito, se los prometo, nos vemos…

martes, 28 de junio de 2011

Lo hermoso que es si nos damos el tiempo…


Felicidades Sergio...
            Hola a todos, espero que se encuentren de maravilla en este martes, martes 28 de Junio, un día que mencionare primeramente por ser el día del cumpleaños de un gran amigo, que aunque no hablemos mucho ya por diferentes razones, es una gran persona para mí, una persona importante que estuvo en muchos momentos de mi vida, aprendimos muchas cosas juntos, compartíamos historias, relatos y demás cosas, extraño esos momentos, pero el día de hoy te felicito, muchas felicidades Sergio Bladimir Salazar Barboza por tu cumple número 20, espero que cumplas muchísimos años más, te deseo lo mejor de lo mejor, que tu vida esté llena de felicidad y miles de cosas más…

Camino a la Hacienda...
            Bueno, ahora continuaré, el día de hoy les quiero comentar sobre algo que viví el día de ayer, junto con unos amigos, nos decidimos en ir a caminar por la mañana, hacia la Hacienda de San Diego, una de las Haciendas antiguas de Cocula que deberían de conocer, se las recomiendo…

Naturaleza...
            La caminata pensábamos hacerla desde hace tiempo, pero no había habido chance, hasta el día de ayer, así que nos decidimos reunir temprano en el centro, para de ahí partir, pasamos por una amiga más en el camino y fuimos los cuatro a caminar, llevábamos una cámara para tener recuerdos, es emocionante tomarse fotos no creen…

Todo estaba verde...
            Pero me di cuenta de algo, como ha sido tiempo de lluvia por estos días en Cocula, el camino estaba enlodado, pero había algo más, algo que me maravillo, todo estaba verde, estaba lleno de pasto, ramas, arbustos, flores y demás plantas, me agradó la salida, porque muchas de las veces no nos damos el tiempo suficiente para apreciar las grandes maravillas que hay en nuestro entorno, pero gracias a la salida de hoy me acordé que hay un mundo fuera, un mundo maravilloso que si nos diéramos un poco de tiempo veríamos lo grandioso que es…

Disfruta de las maravillas...
            Así que los invito a ustedes, a que se den un poco de tiempo para poder salir, salir a caminar o de paseo, salir donde ustedes deseen y poder disfrutar de las maravillas de la naturaleza, despejar un poco su mente y contemplar el mundo exterior, es algo relajante y te llena de vida, se los recomiendo…

            Que tengan un lindo día, nos veremos pronto…

lunes, 27 de junio de 2011

Quería que supieras...

            Hola como estas, espero que bien, si, de verdad espero que estés bien, aunque no lo creas de esa manera…

            Bueno, pues sabes, te diré varias cosas que siento en este momento, y como lo digo, es en este momento, puede que después no sienta lo mismo, pero ahora así lo siento…

            Para comenzar, creo que estoy hablando con una persona que sería desconocida para mí, si, muchos dirán, pero es que él es tu… si lo sé, pero yo no te conozco como para decirte así, sé que lo eres pero no siento que lo seas…

            De niño, me hubiera encantado poder hablarte más seguido, sabes, cuando mi mamá me decía, oye Juan, escribe una carta para mandársela a tu… yo me ponía tan contento, no sabía que decir, tenía muchas cosas que contarte porque hablaba muy poco contigo, así que trataba de decirte lo que para mí creía era importante, lo sé, varias veces parecía más bien una carta a Santa Claus, que una carta para ti, pero así lo pensaba en ese entonces…

            Luego crecí, estuve en la secundaria, esperaba poder hablar contigo para contarte todo lo que me sucedía, pero era una vez al mes las veces que hablabas, muy poco, además que solías hablar más con mi mamá, lo entiendo es tu… pero yo quería hablarte y decirte algo más que un simple, ¿Cómo estás? ¿Cómo te ha ido en la escuela? Quería contarte sobre mis amigos, mis logros y donde es que estaba, pero no había mucho tiempo, la tarjeta se acababa…

            Seguí creciendo, y me daba cuenta que seguías existiendo, pero sólo como palabra, como la frase de, pero es tu… lo sé, así lo sentía durante la preparatoria, puesto que no hablaba ya casi contigo, mi madre era la que te contaba lo que pasaba conmigo…

            Recuerdo que después de cumplir 16 viniste a vernos, pero era muy poco el tiempo que estarías aquí, te invité a que me vieras, a que vieras lo que hacía cada semana, quería que te sintieras orgulloso porque lograba algo, salir actuando todos los domingos, escribir el guión cada semana, quería que te sintieras muy orgulloso de mi, pero al parecer eso no te importó, no quisiste ni siquiera pasar por mí, mandaste a mi madre para que fuera por mi mientras tu esperabas en el carro, porque decías: “Si entro, todos me van a ver y van a querer hablarme, no saldría en un buen rato, y lo que quiero es estar con ustedes”, si tal vez pasaría de esa manera pero solamente quería demostrarte que no era un inútil como lo has creído, porque sabes, crees que el ser útil es tener un maravillosos trabajo donde ganes mucho dinero, y al parecer no te importan mis logros si es que no tienen remuneración económica…

            Fuimos a otro lado, para “Salir en familia” porque si salíamos en Cocula, te reconocerían y no te dejarían tranquilo preguntándote cosas, yo iba muy molesto durante el camino, puesto que esperaba que me dijeras, estoy orgulloso de lo que haces, pero ni siquiera viste que hacía, lo que si recuerdo, es que durante el viaje viste a un pobre anciano por la carretera, quisiste ayudarlo, y mencionaste que algún día pondrías un asilo para que estuvieran los ancianitos, puesto que era más importante ayudar a un anciano que a un niño, porque un niño puede crecer, hacer su futuro y lograr mucho, está joven, pero un anciano ya no encuentra trabajo, nadie los quiere porque sólo son estorbos, entonces esas eran tus razones, sabes, eso me agradó, además de no saber que fueras así, te admiré por ello…

            Después seguí creciendo, y hablábamos mucho menos, creías que era por la vez que me molesté contigo, además por no estar nunca en los momentos importantes, pero sabes, la verdad no era así, las cosas malas que suelen pasarme las olvido, muy fácilmente, no guardo rencor a nadie por algo que me haya hecho, pero no hablaba contigo porque me enfadaba que siempre preguntaras lo mismo, que no te interesara saber más de mí, conocerme mejor, sólo preguntabas si ya tenía empleo, si seguía estudiando, como iba en la escuela y eso era todo, y mi vida personal, que hay sobre ello, mis logros, además también quería conocerte más, pero no te dejabas conocer, siempre ocultabas todo lo que te sucedía, jamás querías contarnos nada, por esas razones no quería hablar contigo, además de que siempre que contestaba me preguntabas, ¿Está tu madre?, que eso para mí es, “Me la podrías pasar”, así que por eso luego, luego te la pasaba y te dejaba hablando…

El tiempo ha pasado...
            Ya tengo 20 años, ya no soy el niño de brazos, ni el de 2 años, ni el de 5, ni el de 12, el de 16 o el de 18, ya eso quedó atrás, siempre quisiste dar lo “Mejor” a tu familia, pero eso ocasionó que dejaras de tener familia, no sólo el dinero es importante, sino el amor y la comunicación que se tiene dentro de la familia, son errores que se pueden cometer, cuestan muy caros luego, porque no se perdieron días, ni semanas, ni meses, fueron años perdidos, 20 años sin convivir como familia, a excepción de las veces que venías, tus venidas “Express” de una semana o menos… sólo recuerdo tres veces que hayas venido, no recuerdo más porque no te diste la oportunidad, ahora entiendes que hubiera sido mejor, pero como digo, él hubiera no existe…

            No te juzgo yo por lo que hayas cometido, tampoco te guardo rencor ni mucho menos, te agradezco mucho por el apoyo “Económico” que nos brindaste, nos ayudó mucho, pero eso se consigue muy fácilmente, el cariño creme que no, además, no te odio, simplemente no te conozco, así que espero que me entiendas si es que no te puedo decir Papá…

Atentamente tu hijo:
Juan Manuel Buenrostro Terán (Joanito Goodface)

domingo, 26 de junio de 2011

Especialmente para ti...


Especialmente para ti...
            Hola como estas, espero que bien, si, de verdad espero que estés bien, aunque no lo creas de esa manera…

            Bueno, pues sabes, te diré varias cosas que siento en este momento, y como lo digo, es en este momento, puede que después no sienta lo mismo, pero ahora así lo siento…

            Para comenzar, creo que estoy hablando con una persona que sería desconocida para mí, si, muchos dirán, pero es que él es tu… si lo sé, pero yo no te conozco como para decirte así, sé que lo eres pero no siento que lo seas…

            De niño, me hubiera encantado poder hablarte más seguido, sabes, cuando mi mamá me decía, oye Juan, escribe una carta para mandársela a tu… yo me ponía tan contento, no sabía que decir, tenía muchas cosas que contarte porque hablaba muy poco contigo, así que trataba de decirte lo que para mí creía era importante, lo sé, varias veces parecía más bien una carta a Santa Claus, que una carta para ti, pero así lo pensaba en ese entonces…

            Luego crecí, estuve en la secundaria, esperaba poder hablar contigo para contarte todo lo que me sucedía, pero era una vez al mes las veces que hablabas, muy poco, además que solías hablar más con mi mamá, lo entiendo es tu… pero yo quería hablarte y decirte algo más que un simple, ¿Cómo estás? ¿Cómo te ha ido en la escuela? Quería contarte sobre mis amigos, mis logros y donde es que estaba, pero no había mucho tiempo, la tarjeta se acababa…

            Seguí creciendo, y me daba cuenta que seguías existiendo, pero sólo como palabra, como la frase de, pero es tu… lo sé, así lo sentía durante la preparatoria, puesto que no hablaba ya casi contigo, mi madre era la que te contaba lo que pasaba conmigo…

            Recuerdo que después de cumplir 16 viniste a vernos, pero era muy poco el tiempo que estarías aquí, te invité a que me vieras, a que vieras lo que hacía cada semana, quería que te sintieras orgulloso porque lograba algo, salir actuando todos los domingos, escribir el guión cada semana, quería que te sintieras muy orgulloso de mi, pero al parecer eso no te importó, no quisiste ni siquiera pasar por mí, mandaste a mi madre para que fuera por mi mientras tu esperabas en el carro, porque decías: “Si entro, todos me van a ver y van a querer hablarme, no saldría en un buen rato, y lo que quiero es estar con ustedes”, si tal vez pasaría de esa manera pero solamente quería demostrarte que no era un inútil como lo has creído, porque sabes, crees que el ser útil es tener un maravillosos trabajo donde ganes mucho dinero, y al parecer no te importan mis logros si es que no tienen remuneración económica…

            Fuimos a otro lado, para “Salir en familia” porque si salíamos en Cocula, te reconocerían y no te dejarían tranquilo preguntándote cosas, yo iba muy molesto durante el camino, puesto que esperaba que me dijeras, estoy orgulloso de lo que haces, pero ni siquiera viste que hacía, lo que si recuerdo, es que durante el viaje viste a un pobre anciano por la carretera, quisiste ayudarlo, y mencionaste que algún día pondrías un asilo para que estuvieran los ancianitos, puesto que era más importante ayudar a un anciano que a un niño, porque un niño puede crecer, hacer su futuro y lograr mucho, está joven, pero un anciano ya no encuentra trabajo, nadie los quiere porque sólo son estorbos, entonces esas eran tus razones, sabes, eso me agradó, además de no saber que fueras así, te admiré por ello…

            Después seguí creciendo, y hablábamos mucho menos, creías que era por la vez que me molesté contigo, además por no estar nunca en los momentos importantes, pero sabes, la verdad no era así, las cosas malas que suelen pasarme las olvido, muy fácilmente, no guardo rencor a nadie por algo que me haya hecho, pero no hablaba contigo porque me enfadaba que siempre preguntaras lo mismo, que no te interesara saber más de mí, conocerme mejor, sólo preguntabas si ya tenía empleo, si seguía estudiando, como iba en la escuela y eso era todo, y mi vida personal, que hay sobre ello, mis logros, además también quería conocerte más, pero no te dejabas conocer, siempre ocultabas todo lo que te sucedía, jamás querías contarnos nada, por esas razones no quería hablar contigo, además de que siempre que contestaba me preguntabas, ¿Está tu madre?, que eso para mí es, “Me la podrías pasar”, así que por eso luego, luego te la pasaba y te dejaba hablando…

            Ya tengo 20 años, ya no soy el niño de brazos, ni el de 2 años, ni el de 5, ni el de 12, el de 16 o el de 18, ya eso quedó atrás, siempre quisiste dar lo “Mejor” a tu familia, pero eso ocasionó que dejaras de tener familia, no sólo el dinero es importante, sino el amor y la comunicación que se tiene dentro de la familia, son errores que se pueden cometer, cuestan muy caros luego, porque no se perdieron días, ni semanas, ni meses, fueron años perdidos, 20 años sin convivir como familia, a excepción de las veces que venías, tus venidas “Express” de una semana o menos… sólo recuerdo tres veces que hayas venido, no recuerdo más porque no te diste la oportunidad, ahora entiendes que hubiera sido mejor, pero como digo, él hubiera no existe…

            No te juzgo yo por lo que hayas cometido, tampoco te guardo rencor ni mucho menos, te agradezco mucho por el apoyo “Económico” que nos brindaste, nos ayudó mucho, pero eso se consigue muy fácilmente, el cariño creme que no, además, no te odio, simplemente no te conozco, así que espero que me entiendas si es que no te puedo decir Papá…

Atentamente tu hijo:
Juan Manuel Buenrostro Terán (Joanito Goodface)

sábado, 25 de junio de 2011

Papás, me podrían escuchar!!!

        Papás, me podrían escuchar algún día, pero quiero que de verdad me escuchen, no que sólo me oigan. Con estas palabras iniciaré la plática del día de hoy, que son palabras que más bien, van dirigidas a los padres de parte de su hijo.

            Papá, necesito contarte muchas cosas, no sabes cómo quisiera que me comprendieras, porque estoy muy cansado de ver que “Pretendas” que me entiendes, si verdaderamente no lo haces.

            No sabes con qué ganas he querido decirte muchas veces lo que me ha pasado durante el día, las cosas que he hecho, o las emociones que he tenido, pero, creo que hoy no será el día, porque hoy vienes cansado y no te puedo molestar con mis tonterías.

            Mamá, muchas veces he esperado que me demuestres tu amor, ese amor que dices tanto tenerme, que sienta yo verdaderamente que me quieres y que me estimas, yo sé que si me regañas y me castigas cuando hago algo malo es porque de verdad te importo, pero hay otras formas en las que me podrías demostrar el amor que me tienes. 

           Cómo extraño esas caricias que me dabas en mi cabello cuando era niño, como extraño esas palabras que me decías cuando llegaba de la escuela “¿Cómo te fue en la escuela?”, pero también entiendo que ahora no puedas hacer o decir todo eso, porque estás cada día más cansada o tienes que hacer otra cosa más importante, entiendo, tu tiempo es valioso.
            Yo no sé cómo es que muchas de las veces sacan conclusiones de lo que hago o de cómo es que soy, si es que no me conocen verdaderamente, no saben cómo es que me comporto verdaderamente porque no te das el tiempo para conocerme mejor, pero lo entiendo, no hay tiempo para tonterías…

            Me molesta que muchas de las veces me critiquen por cómo me visto, por cómo me peino, por las personas con las que me junto o insinúen cosas que yo no he hecho. Me molesta que digan que soy de tal o cierta forma; si no han tenido tiempo para conocerme y yo sé que a tu vecina o a la vieja que te viene a decir lo que “Hago” le haces más caso, además que para ella hay que dejar tiempo exclusivo, porque es la que te cuenta “Mi vida, lo que hago o dejo de hacer”.

            Bueno, acepto que si me he pasado en ocasiones, puesto que les he llegado a mentir, y en ocasiones digo que voy a tal lugar y me voy a otro lado, pero eso lo hago porque cuando te quiero contar de las cosas que me pasan o el por qué me gusta hacer algo, sólo me regañas y no te das el tiempo de Escucharme, yo sólo te oigo gritar y muchas de las cosas que me dices me lastiman y me duelen, porque no sabes cómo pasan realmente las cosas.

            Además tu Papá, cuando me hablas por teléfono, sólo hablamos unas pocas palabras, porque la tarjeta se te va a terminar, y no hablamos sobre lo que alguna vez quise contarte, sobre mis experiencias que he tenido, puesto que no estamos cerca y no nos vemos en años, pero tú siempre te has preocupado más porque no falte dinero en la casa que has olvidado lo que hay en ella, y no me refiero a las cosas materiales, sino a las personas que dejas tiempo sin ver “Por darles lo mejor”, pero sabes, aún no he encontrado una tienda en donde pueda comprar el tiempo perdido sin estar contigo, o alguna tienda donde vendan el cariño y comprensión que un padre puede tener con su hijo…

            Además, estoy cansado de que traten de corregir mis errores, cuando fueron ustedes mismos que cometieron los mismos, sabe, en esos momentos no quisiera una voz que me diga que hice mal, eso ya lo supe de la peor manera, necesito una persona que me escuche, me entienda, me comprenda y me estire la mano para ayudarme a salir del problema, porque ahorita que te tengo podrías ayudarme a corregir mis errores y no sólo regañarme, quien sabe después y no estés para ayudarme con esos errores que seguiré cometiendo porque nadie me ayudó a saber cómo salir de ellos.

            Bueno, creo que por el día de hoy, es todo lo que te diré, espero que lo hayan leído, y si no, te entiendo, no tienes tiempo de escucharme…

Te quiere, tu hijo
Joanito Goodface